516. En recuerdo de un fracaso.

Mañana se cumplirá un aniversario más del 9 de Abril,- la Huelga General de 1,958 contra la tiranía del general Fulgencio Batista y Zaldívar, autor del golpe de estado contra un gobierno legítimo al que quedaban noventa días de ejercicio, pues las elecciones generales estaban convocadas. Un ambiente casi alegre vivía la nación: unos puestas sus esperanzas en el Partido Ortodoxo creado por Eduardo Renato Chivas, que llevaba como candidato a un prestigioso profesional, siendo el principal adversario el Partido Revolucionario Auténtico cuyo candidato era también una figura pública muy conocida y apreciada: el Dr. Carlos Hevia. Foto: Universidad de Camagüey.

Contra ellos, se tramó el golpe porque el gobierno del Dr. Carlos Prío Socarras era demasiado “liberal e independiente” para los grandes intereses económicos y políticos que dominaban el país, tanto nacionales como de los EE.UU. Ellos impulsaron el golpe de estado batistiano y son, en última instancia los que han traído la desgracia a la Patria con sesenta y cuatro años de desastres económicos, políticos y sociales, aunque algunas luces nacieron entre las manchas de nuestra Estrella. No cabe duda que el saldo histórico, económico, social y político es contrario a la existencia del actual régimen político militar que domina la Nación.

Contra los que impulsaron el golpe y contra quienes lo ejecutaron y apoderaron del poder, se fue uniendo el pueblo cubano, sin distinción de grupos étnicos, económicos o sociales: pobres, ricos y muy ricos apoyaron la lucha contra el tirano y sus crímenes: la principal organización que dirigió esa lucha fue el Movimiento Revolucionario 26 de Julio, nombre que adquirió como bandera de la lucha que en esa fecha, pero de 1,953, dirigió el Dr. Fidel Alejandro Castro Ruz con el apoyo de otros partidos y de la mayor parte de la juventud.

La Huelga General del Nueve de Abril, estaba condenada al fracaso de antemano,- como planteara el Dr. Ernesto Guevara de la Serna-, por la falta de apoyo dentro del movimiento obrero, de entrenamiento militar y de Inteligencia entre las organizaciones opuestas al tirano.

No obstante, se produjeron alzamientos en numerosos puntos de la Isla, como Sagua la Grande, Cienfuegos, Las Villas, Oriente, la Habana, por citar los que recuerdo ahora. El fracaso destruyó el movimiento revolucionario del M-26-7 en La Habana, llevando a la muerte, al exilio o la absoluta clandestinidad a los más destacados luchadores contra el régimen. La Sierra, tuvo que enviar a decenas de sus cuadros,- como los Ameijeiras-, a reorganizar el movimiento revolucionario en diferentes lugares, especialmente en La Habana.

Eso es Historia y forma parte inseparable de las luchas de nuestro pueblo por un mundo mejor. Creo que la Historia ya Absorbió al principal responsable de los muchos fracasos y pocos éxitos. Por ello, quiero traer al presente y como recuerdo de los que murieron, sólo a una figura que conocí bien: Carlos Roberto Aztiazarraín Turró, que dudo mucho conozcan las actuales generaciones.

Carlos era un joven trabajador de Otis Elevator (ascensor), estudiante brillante de Artes y Oficios de La Habana en la especialidad de Electricidad Industrial y, simultáneamente,  Capitán de una brigada de trabajadores y estudiantes que luchaban contra la tiranía. Fue estudiante de Premio en todas sus asignaturas y una persona tranquila, serena, firme dialogante tanto en su trabajo como con sus compañeros combatientes.

Una forma gráfica de demostrar por qué tenía que fracasar la Huelga, es que el arma que llevó al asalto a la Armaría de la Habana Vieja, fue una pistola parabellum de la I Guerra Mundial, que cargaba balas de fusil y que él no sabía desarmar ni había probado en tiro real. Con ella cayó muerto en los baños de un edificio cercano a la Armería.

Poco más o menos, esa era la misma instrucción que tenía el 90% de los combatientes de ese fatídico día: el 9 de abril de 1,958.

En su honor, se dio el nombre a una escuela pública en su barrio, Luyanó. También murieron allí  Roberto A. Casals, Marcelo Muñoz, Reynaldo Aulet, tres personas excepcionales.

Gloria eterna para los que murieron luchando por la Patria, antes, después y ahora.

Huelga del 9 de abril de 1958: Aquel día se luchó y murió en todo el país. Por el Dr. Faustino Pérez Hernández.

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